¿Qué opción es la mejor para salir de deudas?

 

Si las deudas te agobian y no sabes cómo salir de ellas, existen al menos tres esquemas que te permiten liquidarlas.

 

En este artículo, te explicamos en qué consisten la reestructuración, la quita y la consolidación de deudas, y cuáles son los casos en los que debes por alguna de estas opciones.

 

Reestructura

 

Es cuando se cambian los términos y condiciones de pago de una deuda, al no poder liquidarla con las condiciones iniciales.

 

Para obtener esas nuevas condiciones de pago, hay que negociar con la institución financiera con la que tienes la deuda. 

 

Ventajas de la reestructura

 

  • Podrás pagar el total de tu deuda con condiciones y plazos más accesibles para ti.

 

  • Muestras voluntad de pago.

 

  • Al regularizarte con los pagos, podrás recuperar poco a poco tu score crediticio y limpiar tu historial.

 

Desventajas de la reestructura

 

  • Es probable que termines pagando más intereses a un plazo mayor. 

 

  • Tus ingresos estarán comprometidos y restringidos por el tiempo en que pagues tus deudas. 

 

¿En qué casos debes pedir una reestructura?

 

  • Si te atrasaste en el pago de tu crédito y tienes dificultades para cubrir tus gastos mensuales. 

 

  • Si tu historial crediticio ha sido bueno hasta el momento en que dejaste de pagar a tiempo la deuda, ya que tendrás más posibilidades de que te acepten una reestructura de pagos. 

 

¿En qué casos no debes pedir una reestructura?

 

  • Cuando tienes ingresos suficientes para cubrir el monto pendiente de tu crédito. 

 

  • Si tienes deudas con altos intereses bancarios y quieres pagarlas a una tasa menor, es más conveniente pedir una consolidación.

 

Quita

 

Es cuando te hacen descuento en el pago de una deuda al llegar a un acuerdo con la institución financiera a la que le debes o con el apoyo de una reparadora de crédito. 

 

Generalmente, en una quita recibes descuentos que van desde el 30 al 80 por ciento de tu deuda original. 

 

Ventajas de la quita

 

  • Si ya no tienes capacidad de pago y te es imposible ponerse al corriente, la quita te ayuda a disminuir el peso de las deudas en tu vida personal. 

 

  • Dependiendo del acuerdo que se alcance con la institución financiera, puedes deshacerte de esa deuda impagable de forma rápida. 

 

Desventajas de la quita

 

  • Afecta a tu historial crediticio, ya que la quita se registra en Buró de Crédito hasta por 6 años, dependiendo del monto adeudado. 

 

  • No podrás acceder por largo tiempo a productos financieros como créditos personales, hipotecas u otros financiamientos a bajos costos que te ayuden a crear patrimonio.

 

¿En qué casos debes pedir una quita?

 

  • Cuando tu situación económica sea tan mala que generó una afectación prolongada en tus ingresos debido a un evento desafortunado: desempleo, una emergencia o accidente, etcétera. 

 

  • Cuando el monto de tu deuda es tan grande que tus ingresos ya no son suficientes para hacerles frente. 

 

¿En qué casos no debes pedir una quita?

 

  • Cuando tus deudas tengan 30 días o menos de atraso y tienes ingresos suficientes para ponerte al corriente. 

 

  • Si tu objetivo es mantener un buen historial crediticio para acceder a futuros créditos, la quita te aleja de ello. 

 

 

Consolidación

 

Es una estrategia de ahorro que te permite pagar dos o más deudas bancarias a una tasa de interés más baja. 

 

Ventajas de la consolidación

 

  • Pagas menos intereses.

 

  • Tus deudas dejan de crecer, ya que las pagarías a un menor costo y a una tasa fija. 

 

  • No afectas tu score e historial crediticios.

 

  • Evitas pagar intereses moratorios por olvidar las fechas de pago de tus créditos. Solo te concentras en hacer un pago cada mes. 

 

Desventajas de la consolidación

 

  • Si tu historial crediticio no es bueno, es probable que rechacen tu solicitud de consolidar deudas.

 

  • Debes reducir tu endeudamiento, es decir, dejar de usar de forma intensiva tus créditos, para que la consolidación funcione.  

 

¿En qué casos debes consolidar tus deudas?

 

  • Cuando estás pagando intereses muy altos por deudas que solo consumen tus ingresos.

 

  • Si tienes muchas tarjetas o créditos activos. 

 

  • Cuando tu historial crediticio es lo suficientemente bueno para optar por un préstamo a baja tasa de interés. 

 

¿En qué casos no debes consolidar tus deudas?

 

  • Si tu historial crediticio es malo.

 

  • Si entre tus planes está seguir pidiendo créditos y préstamos, en síntesis, si vas a seguir endeudándote.  

 

  • Si no demuestras tener capacidad de pago suficiente para liquidar tus deudas.

 

¿Cuál de las alternativas propuestas para aliviar tus deudas has aplicado o piensas aplicar? ¡Déjanos tus comentarios!